En la sesión ordinaria de noviembre, la abogada y ex directora del Centro UC para la Familia, Carmen Domínguez Hidalgo, y a la historiadora e Investigadora del Instituto de Estudios de la Sociedad (IES), Catalina Siles Valenzuela, abordaron los diferentes enfoques de las corrientes feministas contemporáneas.
El pasado lunes 25 de noviembre de 2024, la Academia celebró su tradicional sesión ordinaria, la que tuvo como ponentes invitadas a la doctora en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid (España), Carmen Domínguez Hidalgo y a la doctora en Sociología por la Pontificia Universidad Católica de Chile, Catalina Siles Valenzuela, quienes reflexionaron sobre la noción de dignidad y el rol de la maternidad en el movimiento feminista actual.
La primera en intervenir fue la ex directora del Centro UC de la Familia, Carmen Domínguez, quien explicó que “en el presente, las desigualdades o las inequidades que sobreviven en el trato de la mujer no provienen especialmente de la ley. En general, si nosotros vamos a revisar el marco jurídico, hoy está reconocido el principio de igualdad y de la no discriminación arbitraria de la mujer”.
“Una como mujer no puede sino sentirse feminista cuando una observa que hay esta variedad de inequidades y desigualdades de oportunidad. Pero, no podemos hablar del feminismo en singular atendidas las numerosas corrientes que en el tiempo y en la actualidad conviven bajo el mismo concepto. Esa pluralidad es la que permite explicar porque tenemos en el presente profundas diferencias en torno a los modos de avanzar en igualdad y a cuáles son las esenciales reivindicaciones en esta materia”, continuó.
Al concluir su exposición, Domínguez enfatizó que “el problema de estas últimas corrientes feministas es que han ido apartando y han ido disociando la reflexión de la noción de dignidad. En realidad es justo y necesario que mujeres y hombres reciban la misma igualdad de oportunidades de desarrollarse en la vida por un tema de igualdad en dignidad, porque somos iguales”.
Luego, fue el turno de la investigadora del Instituto de Estudios de la Sociedad (IES), Catalina Siles, quien afirmó que “el feminismo tiene una deuda pendiente con la maternidad. […] Esto ha llevado a que la maternidad pierda protagonismo en el discurso y la acción política de los grupos más influyentes del feminismo contemporáneo con consecuencias que aún no se han explorado lo suficiente”.
“Aunque la avanzada tradicionalista ha identificado el vacío que el feminismo ha dejado en torno a las tensiones o conflictos personales y sociales que provoca la maternidad, está lejos de ofrecer una solución real a las dificultades contemporáneas. Esto se debe a que sus propuestas poco resuenan con las mujeres de hoy quienes, en su mayoría, valoran los espacios conquistados durante este último siglo y medio”, agregó.
En su conclusión, Siles planteó que “la solución a la encrucijada que enfrentan las mujeres no radica fuera del feminismo por paradójico que parezca. Defender los intereses de las mujeres y reivindicar la maternidad no son objetivos opuestos, sino que por el contrario, están profundamente interrelacionados y son plenamente compatibles”.