El ex Ministro de Economía y ex presidente del Banco Central, José De Gregorio y el sociólogo y escritor de la Universidad de Chile Carlos Ruiz, expusieron sus investigaciones sobre la disyuntiva del progreso económico y la distribución de los bienes materiales.
El pasado martes 05 de mayo de 2020, la Academia se reunió para conversar y reflexionar sobre “la ética del crecimiento y el dilema de la desigualdad”para intentar interpretar los descontentos sociales en Chile y en el mundo.
El primero en exponer fue el sociólogo y escritor Carlos Ruiz, quien abordó el tema a través de un breve análisis histórico, desde la época feudal hasta hoy, para mostrar la forma en que han evolucionado las economías a través de la redistribución de los bienes materiales y el trabajo.
Según el exponente, los cambios económicos y sociales que trajo la modernidad y el principio de que todos los hombres nacen iguales, aceleró la crítica hacia los sistemas tradicionales y llevó a las personas a cuestionarse lo que es la desigualdad. “Recién ahí se rechaza la desigualdad como condición natural de los seres humanos”.
Luego continuó reflexionando sobre el crecimiento de los últimos 50 años en Chile. Donde observó que hay una contradicción entre pobreza y desigualdad. “Se suele apuntar que con el crecimiento todos los barcos flotan, sin embargo en el caso chileno se produce una aparente paradoja, en la simultaneidad con que a la vez disminuye la pobreza aumenta la desigualdad. La explicación reside en el aumento veloz de la concentración de la riqueza a unas tasas explosivas… entonces unos barcos parecen flotar más que otros”.
Carlos Ruiz terminó su exposición, concluyendo que en la actualidad “existe una producción mercantil de la desigualdad, lo que redunda en agudos malestares sociales y culturales, de los cuales tenemos que hacernos cargo”. Pues esto más la emergencia sanitaria ha llevado a nuestro país a una crisis política y de representatividad.
Posteriormente fue el turno del economista José De Gregorio, quien se aproximó al tema analizando los indicadores productivos, desarrollo humano y de bienestar social.
El académico comenzó su presentación hablando sobre la historia del crecimiento económico.“En un periodo de aproximadamente 200 años, de mucho progreso de la humanidad, también ha habido una caída de la pobreza”. Sin embargo, esa prosperidad no se dio de forma pareja en todo el mundo. Como señaló el economista, tenemos zonas de África, Asia y Latinoamérica que siguen muy empobrecidas.
A continuación explicó el progreso y se detuvo en la desigualdad y el bienestar de los países, “para mejorar la vida de la población es necesario tener altos ingresos, de ahí la relevancia del crecimiento, que no necesariamente va ir aparejado en mejora de la equidad y de progreso parejo para todos” Por lo tanto, “no basta con mirar el PIB y dividirlo entre sus habitantes hay que mirar cómo se distribuyen los ingresos del PIB”.
En sus comentarios finales el economista habló sobre las causas de la desigualdades en los países a partir de la Globalización y el avance del trabajo técnico.
De Gregorio terminó con una cita del economista británico Anthony Atkinson “si estamos preocupados de la igualdad de oportunidades mañana, tenemos que preocuparnos de la desigualdad de ingresos hoy, porque la desigualdad de ingresos de hoy condiciona la desigualdad de oportunidades en el futuro”.