En la sesión ordinaria de noviembre los académicos de número, Pedro Morandé Court y Pedro Gandolfo Gandolfo, y el Presidente de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas de España, Benigno Pendás García, analizaron el aporte del Barroco en Chile y América Latina.
La sesión de noviembre de la Academia Chilena de Ciencias Sociales, Políticas y Morales tuvo como ponentes invitados a los académicos número, Pedro Morandé Court y Pedro Gandolfo Gandolfo, y el Presidente de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas de España, Benigno Pendás García, quienes reflexionaron sobre el periodo Barroco tanto en Chile como en Latinoamérica.
El primero en intervenir fue el académico de número, Pedro Morandé, quien explicó que entiende por Barroco “no sólo un determinado estilo cultural en literatura, arquitectura, pintura, música, teatro, danza y demás artes escénicas, sino una cosmovisión que las incluye a todas ellas y que es una expresión hermenéutica de la modernidad”.
El miembro de la Academia Pontificia de Ciencias Sociales agregó que en América Latina “el «ethos» barroco tiene como núcleo el esfuerzo por lograr la convergencia y mutuo respeto en la unidad de la diversidad de sus lenguas habladas, de sus símbolos religiosos y familiares, de sus hábitos de trabajo y vida política, de sus paisajes naturales y entornos ecológicos”.
Al concluir su exposición, Morandé enfatizó que “seguir hablando del Barroco no es una cuestión «esencialista», como a veces se me ha reprochado infundadamente, sino una realidad empírica que se logra descubrir cuando se levanta la mirada desde las inmediatas apariencias institucionales de la sociedad al horizonte de más largo plazo donde vive y crece la cultura de todas las naciones”.
>> Leer exposición completa de Pedro Morandé Court
Luego, fue el turno del académico de número, Pedro Gandolfo, quien afirmó que “los terminos Barroco y modernización son dos nociones que tienen un alto grado de ambigüedad y controversia. Sin embargo […] me parece que no puede haber otra respuesta sino que el Barroco es una gran contribución a la modenización en América Latina y en Chile”.
El magíster en Filosofía por la Universidad de Chile comentó que “he podido distinguir claramente dos líneas del Barroco en Chile […] una línea ligada a la elite, que parece adherir a la modernidad, concebida a la luz de la racionalidad y de la secularización […] y una segunda línea, muy poderosa y de gran en volumen y belleza, conformada por lo que se llama el canto a lo divino y a lo humano, «el canto a lo poeta» […] en el mundo popular y rural”.
Para concluir, Gandolfo planteó que «el canto a lo poeta» “me parece una forma de modernidad muy interesante, por que crea un nuevo público, una nueva audiencia, y ese público, es un público masivo, y eso me parece que es una de las características fundamentales de la modernidad. Deja de ser la elite la única destinataria del arte y pasa a serlo un público masivo y popular”.
Finalmente, fue el turno del Presidente de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas de España, Benigno Pendás, quien explicó sobre el Barroco que “tenemos que reivindicar en el mundo latino esa pertinencia de otra visión del mundoque no es estrictamente racionalista, que no es rigurosamente geométrica o metemática, pero que tiene mucho de filosofía de la vida, de experiencia, de razón vital y que, por tanto, nos identifica como una de las grandes culturas universales”.
El doctor en Ciencias Políticas de la Universidad Complutense de Madrid, España, agregó que “el Barroco llega a América con las carabelas y, naturalmente, el Barroco encuentra allí un clima muy propicio por muchas razones. Se ha dicho incluso que América, la que va desde el Río Grande hasta la Tierra del Fuego, es un continente Barroco”.
Al concluir su exposición, Pendás enfatizó que “nosotros no sabemos bien en el mundo en que vivimos […] el estudio de la historia enseña mucho, la historia es maestra de la vida y yo creo que el Barroco nos enseña mucho, a los españoles, a los latinoamericanos y a toda persona con el deseo de comprender el mundo, por que es dinámico, cambiante y apasionante”.
