El nuevo numerario pronunció su discurso de incorporación que tituló “La ética política de Albert Camus”. El discurso de bienvenida correspondió al académico Carlos Peña González.
En el Salón de Honor del Instituto de Chile se celebró el pasado jueves 31 de agosto la ceremonia de incorporación de Daniel Mansuy Huerta, como miembro de número de la Academia de Ciencias Sociales, Políticas y Morales. El nuevo numerario sucederá en el Sillón N°30 de la Corporación a Don José Zalaquett Daher (1942-2020).
La solemne ceremonia fue encabezada por el Presidente de la Academia, Jaime Antúnez Aldunate; por el Secretario Académico, Jorge Peña Vial; y por el Presidente Emérito, José Luis Cea Egaña. Mientras que el discurso de recepción estuvo a cargo del académico, Carlos Peña González.
En sus palabras introductorias, el Presidente de la Academia, Jaime Antúnez, compartió una frase del expresidente de la Corporación, Francisco Orrego Vicuña, quien afirmaba que “a la Academia había que quererla para servirla y que esa era una tarea importante para Chile”. En este sentido, agregó que “en 30 años cualquiera puede reconocer que ese querer, aunque supone un compromiso ad vitam […] es valorable y compensa perseverar en él”.
A continuación, el nuevo Académico de Número, Daniel Mansuy, recordó a su antecesor en el Sillón N°30, José Zalaquett Daher, sobre quien destacó “su libertad de espíritu a la hora de pensar; su capacidad para dudar de sí mismo y nunca dar por sentados sus puntos de vista; su inalterable respeto por los argumentos contrarios; su vastísima y admirable cultura; su honestidad intelectual; y su inclaudicable defensa de los Derechos Humanos”.
Posteriormente, comenzó su ponencia titulada “La ética política de Albert Camus” reflexionando sobre la distancia del escritor y la intelectualidad francesa marxista de la época. Sobre este tema, el Doctor en Ciencia Política por la Universidad de Rennes (Francia) explicó que “Albert Camus es un hombre solo, su voz es solitaria. Sin embargo, y este es el fundamento de su posición, nunca estuvo dispuesto a transigir con determinadas modas por más fuertes que fueran los vientos a favor de ellas”. Y agregó que el filósofo argelino-francés “pregona una ética particularmente severa: la regeneración política exige hablar con la verdad, siempre y en todo lugar”.
Acerca de la idea de que la necesidad histórica justificaría cualquier medio para obtener el fin, el profesor de Filosofía Política en el Instituto de Filosofía de la Universidad de los Andes afirmó que “su aproximación es algo distinta: según él, los medios no pueden separarse de los fines”. Y concluyó sobre el pensamiento de Albert Camus que “la pregunta no es tanto si el fin justifica los medios, sino más bien si acaso los medios justifican el fin; si los medios están a la altura del fin. No es posible perseguir fines elevados con medios inmorales, pues eso implica corromper los objetivos nobles”.
El Académico, Carlos Peña, destacó la labor intelectual del nuevo académico, elogió sus dos libros dedicados a temas políticos y complementa su análisis acerca de la moral de Albert Camus. “Para el nuevo académico la verdadera grandeza de la política no radica en su desmesura, sino en el hecho que ella es una forma imperfecta y casi a tientas de configurar la vida colectiva y satisfacer, hasta donde eso es posible, las necesidades humanas”, enfatizó. Y para concluir su intervención planteó una pregunta: “¿hay algo en la ética de Albert Camus acerca de la que Daniel Mansuy llama la atención, que haga urgente, valdría la pena preguntarse, en el Chile de hoy?”.
La solemne ceremonia finalizó con la investidura con la medalla de Miembro de Número, por parte de Jaime Antúnez Aldunate, que acredita la incorporación de Daniel Mansuy Huerta como nuevo Académico de Número de la Academia de Ciencias Sociales, Políticas y Morales del Instituto de Chile.
El Mercurio destacó la ceremonia de incorporación del nuevo Miembro de la la Academia de Ciencias Sociales, Políticas y Morales, Daniel Mansuy Huerta.
